Las latas de conserva de calidad siempre tienen que estar presentes en nuestro hogar. No solo nos pueden sacar de más de un apuro cuando no sabemos que comer, sino que también ofrecen muchos beneficios que hacen que sean muy interesantes. Si todavía no conoces los beneficios de los alimentos en conservas, te invito a conocerlos a continuación. Te darás cuenta de que es una buena opción de nutrición.
Tabla de contenidos
Mantiene las propiedades nutricionales del producto
Si compramos alimentos en conservas de calidad como los que podemos encontrar en Arroyabe.es, latas de máxima calidad, podemos tener la certeza de que los alimentos que vamos a comer seguirán teniendo las mismas propiedades nutricionales que los alimentos frescos. Esto significa que podemos ingerir todas las proteínas, lípidos, glúcidos… del alimento. Y todo esto se consigue sin tener que añadir aditivos al producto, es decir, estamos ante un modo de alimentación saludable.
Alimentos saludables
Gracias a que los alimentos están perfectamente conservados, podemos tener la certeza de que las latas de conservas no solo son sanas, sino que también son muy nutritivas.
Muchos especialistas recomiendan alimentos en conserva en las dietas equilibradas, lo que demuestra que son muy beneficiosas. Dependiendo de la lata elegida, suele ser común que nos ofrezcan una buena dosis de vitaminas, ácidos grasos saludables, bajo contenido en grasas trans… Por ejemplo, si queremos comer una lata cuyo ingrediente sea rico en ácidos grasos Omega 3, lo que debemos hacer es consumir latas de pescado azul como las sardinas, atún o caballa entre otros pescados. Hay que recordar que el aceite hace que el Omega 3 se conserve perfectamente hasta el consumo del producto. En el caso de las lastas de conservas de mariscos como las almejas o berberechos nos ofrecen una fuerte dosis de hierro y proteínas.
Tardan en caducarse
Las latas de conserva se presentan como una gran opción de tener en casa ya que son productos que no hay que consumir rápidamente, sino que podemos dejar las latas en la despensa y consumirlas cuando queramos. Todo dependerá del producto que hay en el interior, pero normalmente pueden aguantar varios años sin caducar. No hay que añadir que en la lata se muestra la fecha de consumo preferente y no la fecha de caducidad. Esto quiere decir que hasta esa fecha se estima que el alimento se conservará en buenas condiciones, luego irá perdiendo propiedades.
No debes olvidar que hay algunas latas que mejoran con los años. Algunos ejemplos son las navajas, sardinas o las almejas entre otros productos. Eso sí, intenta no superar las fechas por precaución, sobre todo si el producto no es de alta calidad y es una lata de las baratas.
Producto esencial
Hay que tener en cuenta que en cada lata se usa todo. A la hora de elegir una lata u otra, no solo hay que fijarse en el precio, sino que hay que mirar en el número de raciones que incluye. Así podremos darnos cuenta de si el producto es grande o no y lo podremos abrir en el momento más oportuno.
Producto económico
Estamos hablando de un alimento que sale muy barato, de aquí que esté presente en la gran mayoría de despensas. Si tenemos en cuenta su precio y sobre todo sus características, podemos darnos cuenta de que las latas en conserva son una gran opción de alimentación. A esto hay que añadir que hay una amplia variedad de productos entre los que elegir. Personalmente siempre recomiendo tener en la despensa un buen número de latas de conserva de diferentes productos para tirar de ellas cuando nos apetezcan o no tengamos nada que comer en ese momento.
Producto sostenible
Se ha demostrado que las conservas son un producto sostenible y que además no representan un problema de espacio, gracias a que ocupan muy poco en el armario de la cocina. A esto hay que añadir que la gran mayoría de conservas no necesitan estar en refrigeración para conservarse, de aquí que se diga que es un producto sostenible. Como se conservan muy bien los alimentos a temperatura ambiente, esto supone un gran ahorro de energía. Eso sí, también hay latas como las de boquerones o anchos que sí que necesitan de refrigeración para conservarse adecuadamente. A este tipo de latas se las llaman semi-conservas.